Bueh, esto era basicamente necesario para TLE. Habian preguntas sin responder, ¿y que mejor que una secuela para contestarlas? Es la hora del preludio a la quinta temporada que sucedera despues de esta secuela (cuando termine los examenes llegara la quinta xDDDDD). Espero que disfruten, solo seran unos cinco capis aproximadamente, aunque a lo mejor son seis. Todo depende de como salga la cosa (?)

Capitulo 1: El comienzo de todo.

Marte, 1000 d.c., en una versión distinta de la realidad...

Han pasado seis años desde que comenzase la gran guerra Priatica. Y la cosa no andaba bien. El ejercito de Bepher era casi insuperable y tenia todas las de ganar. Algunos consideraban a esta criatura la mismísima encarnación del mal. Había experimentado en su cuerpo con energía negativa, dando lugar al ser mas poderoso jamas visto por las criaturas que en Marte habitaban. Nadie había logrado derrotarlo...

Zona de guerra...

Dos criaturas, ambas de piel de color azul verdosa con escamas y plumas en la cabeza. Sus ropas eran ligeras y de color anaranjado. Ambos hablaban seriamente.

—Definitivamente no tenemos escapatoria Shayks. Bepher nos destruirá a todos. Es cuestión de tiempo.
—Me da una rabia. Logró aislar el planeta de forma que si morimos nuestras almas no irán al inframundo. Y encima no tenemos forma de huir a la tierra —Dijo Shayks.
—Ni siquiera allí tendríamos escapatoria. Los seres que habitan ese planeta no son lo suficientemente avanzados ni poderosos para destruir a Bepher —Dijo la otra criatura.
—Algo tenemos que hacer para superar la barrera que nos ha impuesto. Debemos sobrevivir a toda costa y como sea Hyroku.
—... —Hyroku solo podía permanecer callado debido a que la situación era demasiado delicada.

Shayks le lanzó un puñetazo y lo tiró al suelo. La criatura se levantó adolorida.

—Pensaba que tu siempre ibas a luchar contra cualquier cosa por muy imposible que fuera la victoria. Pero ya veo. Yo pensé que eras el que nos iba a salvar.
—Shayks. Ya no hay salvación posi... —Pero se calló a mitad de la frase.

La criatura se retorció de dolor al notar algo. Su amigo sabia lo que le pasaba.

—¿Que has visto Hyroku? Dímelo cuanto antes. Podría ser importante.

Hyroku esperó varios segundos hasta recuperarse.

—He visto dos cosas... He visto la derrota de Bepher a manos de cinco guerreros de la luz... Pero no son de este mundo.
—¿A que te refieres con eso? —Dijo Shayks.
—Serán cinco humanos, o al menos eso parece. Y la otra visión...
—¿Que viste en tu otra visión?

Hyroku suspiró y después contó lo que había visto:

—"Del abismo surgirán. En la roca de la vida llegaran. Y cuando el tercer rayo se precipite sobre la tierra... La oscuridad... Perecerá"...
—Oh bonita profecía Hyroku. Lastima que Bepher ya la haya escuchado gracias a mi.

Una criatura que flotaba en el aire, de color rojo oscuro y de seis ojos, boca provista de dos hileras de colmillos y grandes brazos con afiladas garras lanzó por la boca un tremendo rayo que impactó de lleno en el vientre de Hyruko. Shayks se agachó para tratar al herido mientras otros soldados aliados de Shayks salían a ayudar.

—No tenéis nada que hacer contra nosotros —Dijo la criatura mientras era atacada por rayos de energía que los aliados le lanzaban sin hacerle el mas leve daño. Este tan solo lanzó otro rayo devastador que destrozó a tres de los soldados.

Hyruko abrió los ojos y miró con ellos a Shayks.

—Shayks... Solo tendrás esta oportunidad... Hay algo que tenia que decirte...

Hyruko sacó de su bolsillo una bolsa con diez piedras en su interior. Shayks miró a su compañero absorto mientras los demás seguían batallando contra la criatura oscura sin éxito.

—¿Hyruko aguanta vale? Todavía puedo...
—No puedes Shayks, y lo sabes. Usa esas piedras para salir del planeta junto con Ikeria. Ambos podéis salvaros de la masacre.
—¿Pero que hay de ti Hyruko? Ven conmigo, al menos iras al inframundo y podrás descansar allí.

Sin embargo su colega no respondió. Sus ojos habían perdido todo brillo. Había muerto. Mientras se secaba las lagrimas, Shayks se largó corriendo mientras los demas luchaban en vano. Al llegar a un hoyo en el suelo, una criatura de aspecto femenino le recibió.

—¿Que esta sucediendo ahí afuera?

Shayks miró al suelo con la cabeza baja. En ese bunker habían mas de cien criaturas. El rostro dejó a los presentes con la cabeza gacha. Era el fin de todo. Ya no había salvación posible. Ikeria le agarró y le metió en una habitación.

—Si este es nuestro ultimo día quiero que... —Pero Shayks le interrumpió con un dedo mientras sacaba la bolsa con aquellas misteriosas piedras.
—No sera nuestro ultimo día Ikeria. Todavía tenemos una posibilidad.

Shayks cerró los ojos y pensó en la salvación de Ikeria y el. Tras un rato, las piedras emitieron un gran destello, cada una con un brillo característico. Blanco, negro, Verde, violeta, gris, amarillo, marrón, azul, rojo y azul oscuro. Tras eso, una gran luz envolvió a ambos y de golpe y porrazo, Shayks e Ikeria salieron disparados hacia arriba. Ambos intentaron protegerse al ver que iban a estrellarse contra la pared, pero la atravesaron como si fueran tan solo fantasmas. Mientras se alejaban de la superficie, pudieron ver como sus compañeros se sacrificaban en vano. Luego de un rato, la criatura que había mandado Bepher a masacrarlos, lanzó un potente rayo que provocó una intensa explosión.

—Se acabó —Dijo Ikeria con lagrimas en los ojos.

Cuando se dieron cuenta, habían salido del planeta. Pero por alguna razón, este emitió un tremendo resplandor extraño y su hogar natal cambió drasticamente. De un color verde sutil y amarillo, aparte de los océanos azules, pasó a un color rojo anaranjado. El planeta ahora se veía irreconocible.

—Bepher ha debido de activar la maquina paradójica. Ha destruido la existencia de la vida en nuestro planeta. Y no solo en este momento. Nadie recordará que en nuestro planeta hubo vida.
—Entonces, si Bepher a destruido la linea temporal, ¿Por qué seguimos vivos y alejándonos? —Dijo Ikeria.
—Es sencillo —Dijo Shayks— La paradoja solo afecta a nuestro planeta. Gracias a Hyruko, hemos salvado nuestra existencia.

Tras un par de minutos, empezaron a ver una especie de bola de color azul que cada vez se hacia mas y mas inmensa. Sin embargo, pronto se asustaron cuando por su lado, una gran ráfaga oscura apareció a la izquierda de ellos mas rápido incluso que ellos. Esta acabó chocando contra la gran bola azul.

—Bepher ha llegado a la tierra. Tenemos que llegar cuanto antes allí —Dijo Ikeria.

Tras un par de minutos después, cruzaron la atmósfera del planeta sin que esta les hiciera nada hasta llegar al suelo. Allí su movimiento se detuvo. El paisaje era bastante hogareño y vitaliceo.

—Es un planeta tan bello como era el nuestro —Dijo Ikeria.
—Lo se. Y posiblemente le queden unos años. Bepher no tardará de esclavizar este planeta para crear otra maquina paradójica.
—La raza humana esta perdida.

Shayks observó el paraje y descubrió algo extraño. Frente a ellos, había una especie de bola de color amarillo celeste.

—Esto... ¿No sera...?
—¿Que hace aquí un vórtice temporal? —Dijo Ikeria alarmada.

Shayks sacó un aparato del bolsillo y tras encenderlo, tocó varios botones.

—Este vórtice lleva exactamente a dentro de mil años.
—¿Y que hace aquí? —Preguntó Ikeria.
—... Tal vez... A Hyruko le dieron estas piedras para que protegiese Marte. Resulta que solo pueden usarse una vez cada mil años. ¿Y si alguien ha abierto este portal para ayudarnos a acabar con Bepher? —Dijo Shayks.
—En ese caso no debemos entrar al vórtice con las joyas a mano. Tendremos que esconderlas en algún lugar.

Shayks lanzó un tremendo puñetazo al suelo provocando un pequeño hoyo. Después escondió la bolsa en aquel agujero y empezó a coger piedras y tierra del camino tapando completamente el hoyo.

—Buena idea. Solo una cosa. ¿No te parece que en mil años esto podría ser descubierto? —Dijo Ikeria.
—En ese caso... —Dijo Shayks sacando una especie de chip que lo pegó a la bolsa con las piedras. Esta al activarse el chip se volvió totalmente invisible— Ahora nadie podrá verlas jamas. Pasaran inadvertidas.

Y tras esto, Shayks e Ikeria cruzaron cogidos de la mano el vórtice temporal. No sabían que les depararía el destino, pero confiaban en que fuera mejor que el que habían dejado atrás...

Pero hace mil años... o.o sigue sigue e.e

¡NOOOOOOOOOOOOO! ¡¿POR QUÉ LO HICISTE? ;_; AHORA NO PODRÉ PUBLICAR MI FIC.(por cierto te mande el mp), NO IMPORTA.
Bah, igual otro emocionante fic como siempre de parte tulla, sigue así (aunque no quiera)

Pues nah, paso otra semana y aqui traigo otro capi de la secuela. Disfruten o a la HOGUERA DE ANA (?)

Capitulo dos: Reunión.

En la actualidad...

Han pasado tres meses desde el final de la tercera guerra mundial. Nuestros amigos han estado tomándose unas vacaciones bien merecidas. Sin embargo, Drake y Lemmon ya se habían preparado para ir a entrenar con Y para controlar totalmente su prime mode. Cuando llegaron a la sala, aparte de la chica, también estaban en la CIA Latias y Adán.

—Lo siento chicos, pero tenemos otra cosa mejor que hacer —Dijo Latias.
—Genial. Latias, que tenemos mucha prisa —Dijo Lemmon.
—Paciencia hermano. ¿De que se trata? —Dijo Drake mirando a Adán.
—A mi no me mires. Yo tengo menos idea que tu Drake —Dijo Adán mirando a las dos chicas.

Latias les indicó que se cogieran de las manos y se teletransportaron tras un fogonazo amarillo. Ahora estaban en una especie de descampado con un pequeño bosque.

—¿Donde estamos? —Quiso saber Drake.
—Estamos cerca de Berlin. Es aquí donde puedo empezar a explicaros lo que va a pasar a continuación —Dijo Latias.
—¿De que hablas Lati? —Dijo Adán algo intrigado.
—Veréis. Es mejor que os lo explique Y.

Y se aclaró la garganta y comenzó a explicarse.

—Veréis. Como todos sabréis, menos Adán, supongo, hace mil años fue la batalla que aparece en la leyenda de los cinco guerreros de la luz. Resulta, que uno de los magos blancos era antepasado mio.

Drake y Lemmon se quedaron estupefactos al oír aquello. Adán, al no conocer la historia, se quedó intrigado.

—Si no te importa, me gustaría conocer esa historia.
—Ok, iré directa al grano. Hace mil años, un ser muy poderoso, la criatura original, llegó a la tierra en ademan de destruirla. Sin embargo, cinco guerreros de la luz lucharon contra ella en una batalla que dividió el continente en dos. La criatura fue atrapada y encarcelada en una cueva, mientras su energía fue sellada para evitar su huida. Sin embargo, esta logró sobrevivir seiscientos años después y fue la que le dio los poderes a Silveria.
—Ya decía yo que Silveria era demasiado simple para ser la mala final —Dijo Adán algo aburrido.
—Si muy bonito, pero, ¿Para que todo esto Latias? no lo entiendo —Dijo Lemmon impaciente.
—Vaaaaaaaaaaaale. Resulta que entre los cinco magos blancos, aparte de un antepasado de Y, también estaba... Mi hijo.

Los tres chicos abrieron los ojos como platos, al igual que Y.

—¿Nos estas tomando el pelo no? —Dijo Y.
—No. Y de echo, vamos a tener visita en unos instantes.
—¿Que tipo de visita? —Dijo Drake algo extrañado.
—Esto... Como decirlo... Vienen de un lugar muy lejano... tanto que si Drake pudiera volar, llegaría allí a velocidad luz en unos minutos.
—Latias... —Dijo Lemmon prendiendo su brazo de antimateria.
—¿Mira que sois impacientes eh? Esperad un poco leches... Ah por cierto, poneos esto —Dijo la chica malhumorada.


Mientras los demás se ponían un aparato de traducción de la CIA, Latias abrió un portal amarillo y esperó. Tras un minuto, dos criaturas de piel azul verdoso con escamas y con plumas en la cabeza, aparecieron del portal. Una de ellas tenia aspecto de mujer, mientras el otro tenia aspecto de hombre. Al ver a los chicos, ambos se pusieron a defenderse.

—¿Es una trampa? —Dijo Ikeria.
—No lo se, pero mantente alerta —Dijo Shayks.

Latias dio un paso al frente y empezó a hablar.

—Tranquilos. No os hemos traído hasta aquí para luchar. Solo queremos ayudaros.

Ambas criaturas se miraron a los ojos impresionadas de que pudiesen entender a Latias.

—¿Como puedes hablar nuestra lengua humana? —Dijo Ikeria.
—Tecnología, como podéis ver en mi oreja —Explicó Latias.
—Si lo que queréis es ayudarnos, no vais a lograrlo. Bepher es demasiado poderoso para criaturas como vosotras —Dijo Shayks.
—¿Bepher? Latias, no entiendo nada de nada de lo que esta sucediendo —Dijo Adán.
—Adán, estas criaturas son Marcianos. Y no están aquí de visita, están huyendo —Explicó Latias.
—¿Huyendo de que? —Dijo Drake.
—... Un segundo —Dijo Y— Es.. ¿ Están huyendo de la criatura original?

Los chicos abrieron los ojos como platos. Latias había asentido.

—¿Criatura original? ¿Que significa esto? —Dijo Shayks.

Y dio un paso al frente y les contó a Shayks e Ikeria la leyenda. Ambos se quedaron de piedra cuando la chica terminó de contar la historia.

—Todo concuerda con la profecía que dijo Hyroku antes de morir. Cinco guerreros de la luz destruirán a Bepher. ¿Son estos cinco humanos los que lo harán? —Se preguntó Shayks.
—No. Nosotros no fuimos el que le derrotó. Pero se quienes fueron. Adán, te encargo la misión —Dijo Latias.
—¿Ah si? Por fin algo emocionante. Empezaba a aburrirme —Dijo el chico.

Este realizó su segunda transformación en el acto y tanto Shayks como Ikeria se asombraron mucho.

—¿Bien, que hay que hacer?
—Lo primero de todo... Oye Shayks, ¿ Podrías volver visibles las piedras de donde estaban enterradas? —Dijo Latias.

Shayks asintió y tras sacar un artefacto y pulsar un botón, se oyó un débil pitido.

—Si están enterradas, un segundo —Dijo Adán mientras tocaba con un brazo la tierra.

La tierra empezó a temblar bajo sus pies y una parte del terreno se abrió, mientras una especie de columna empezaba a alzarse. Esta tenia encima una vieja bolsa bastante deteriorada, aunque no estaba rota. Adán pegó un salto y la agarró al vuelo.

—Bien. Adán, tienes que viajar a hace cuatrocientos años. Mi hijo estará allí con cuatro personas. Ellos son los guerreros de la luz, los magos blancos que derrotaran a Bepher.
—De acuerdo. No os preocupéis Shayks y acompañante. Todo saldrá bien.

Y tras decir esto, Adán desapareció tras un fogonazo amarillo...

Esto se pone interesante :O Sigue Sigue.

borbi... y cuanto antes suba este capi tan lindo mejor que esto ha de terminar... dentro capi

eso si, antes de leer el capi, si no leiste este capi no entendereis lo que ocurrira a continuacion http://pokemon-stats.com/foros/viewtopi ... 46#p630972

Capitulo 3: La gran batalla.

Zydeco, Simus, Diana y el escudero de Zydeco, junto con Adán, acabaron en un claro. Tras un rato, Zydeco sopesó las opciones.

—Deberíamos ir hacia el este. Creo que es la mejor opción.

Todos asintieron y se dirigieron hacia donde Zydeco les había indicado. Al llegar, salvo Adán, todos se extrañaron. Delante de ellos se hallaba una extraña maquina clavada a la tierra.

—¿Qué es esto? —Dijo Diana estupefacta.
—Sea lo que sea, no debe ser nada bueno —Dijo Adán.

Zydeco palideció y se volvió hacia la derecha, desenvainando su espada. En esa dirección, una enorme criatura con dos cuernos, de piel oscura y cinco ojos en su cabeza los observaba detenidamente. En su estomago se hallaba un gran ojo de color rojo y en su espalda se hallaban seis pequeñas colas finas como látigos que terminaban en púas punzantes.

—Vaya vaya. Simios humanos. Menos mal, pensé que iba a aburrirme en esta piedra —Dijo la criatura.
—Así que tu eres ese tal Bepher. Interesante. Puede que merezca la pena luchar contigo —Dijo Adán interesado.

La criatura se asombró de que conociera su nombre, pero aun así sonrió.

—Así que aquí me conocen… ¡¡QUE BIEN!! Parece que no va a ser un total aburrimiento haber llegado hasta aquí.
—No lo hagas Simus —Advirtió Zydeco.

Simus, sin pensárselo dos veces, corrió hacia Bepher transformando su brazo esquelético en una espada osea. Sin embargo, la criatura pestañeó y Simus fue lanzado a una velocidad pasmosa hacia atrás chocando contra unas rocas. Simus se levantó sin apenas esfuerzo.

—Caray. Que flojucho es este monstruo. Ni lo he notado —Dijo Simus sonriendo maliciosamente.
—Tiene gracia que un ser inferior se ria cuando sus últimos momentos están teniendo lugar.

Zydeco atacó veloz como un rayo mientras Bepher alzaba una mano. Sin embargo, a pesar de que algo impactó contra el suelo ahondándolo, el espadachín logró esquivar el ataque y lanzó un sablazo hacia su adversario, el cual pudo esquivar fácilmente. Diana aprovechó para intentar atraparlo con grandes ramas, pero Bepher ya estaba prevenido y tras rodearse de un fulgor negro las plantas ardieron con gran intensidad.

—Interesante. Jamas pensé que unos humanos fueran mejores que los guerreros de mi mundo. Parece que me voy a divertir mucho aquí.

Bepher desapareció tras un fogonazo azul y al instante apareció al lado de Simus, el cual no pudo esquivar el tremendo puñetazo que lo mandó a cien metros de su posición. Zydeco intentó lanzar un ataque pero Bepher le atrapó con sus seis colas y tras un gran estruendo, un aura oscura rodeó al hombre haciéndole gemir de pura agonía. Cuando terminó, Zydeco cayó al suelo inconsciente. Su escudero se acercó y le curó las heridas en cuestión de segundos. Bepher se quedó asombrado pero después sonrió.

—Tenéis unos poderes bastante fuertes y bien entrenados. Estoy empezando a divertirme y mucho. Aunque me gustaría ver de que es capaz el que tiene alas —Dijo Bepher con aires de superioridad.
—De acuerdo. Sera interesante —Dijo Adán.

El chico creó una potente llama en uno de sus brazos y una gran bola de antimateria que empezó a explosionar poco a poco con el aire. Adán lanzó una potente ráfaga de ambos ataques que se juntaron y produjeron un gran chorro de energía que se lanzó directo hacia Bepher. Sin embargo, la criatura oscura tan solo movió un dedo y desvió el ataque como si fuera una pequeña piedra lanzada contra un muro. La explosión provocó un gran estruendo seguido de un viento feroz que casi tira a los chicos al suelo.

—No esta mal. Eres mas poderoso que los cuatro restantes juntos. Jamas había tenido un contrincante tan fuerte. Aunque claro, si quieres derrotarme tendrás que hacerlo mucho mejor.
Bepher salió despedido a velocidad luz hacia Adán mientras este salia disparado a velocidad super lumínica. Sin embargo, por extraño que pareciera, Bepher de un manotazo desvió el ataque de Adán tirándolo al suelo. El chico no daba crédito a lo que estaba viendo.

—Interesante. ¡¡Eres mas rápido que la luz!! Igual que mi ojo del centro de mi cuerpo. Cada vez me caes mejor si si —Dijo Bepher cruzado de brazos.
—Pues esto solo ha hecho mas que empezar —Dijo Adán.

Sin embargo, Bepher salió despedido hacia Adán y le propinó un potente mamporro que lo tiró hacia los demás. Zydeco y Simus se lanzaron hacia la bestia, pero este estaba preparado y de dos terribles rayos, los tiró al suelo. Simus se levantó sin esfuerzo con la caja torácica destrozada, mientras Zydeco agonizaba en el suelo y escupía sangre por la boca a borbotones. Mientras Jaime curaba las heridas de Zydeco, Diana intentó azotar a Bepher con ramas a modo de látigos, pero este soltó una gran ráfaga de energía oscura y tras destrozar las lianas de la chica, el rayo impactó en el suelo cerca de ella y la mandó lejos e hiriéndola gravemente.

—Insensatos. ¡¡SOY LA CRIATURA MAS PODEROSA DEL UNIVERSO!! ¡¡NADA DE LO QUE HAGÁIS PODRÁ DERROTARME!!
—Tal vez haya una forma —Dijo Adán.

Y acto seguido, el chico creó cuatro esferas de luz azul violáceo y las lanzó a los cuatro chicos…

Pues nada. Tras un buen tiempo de vacas, ya es hora de acabar de una vez con la secuela... Y haber cuando empiezo la quinta temporada xDDDDDD

Capitulo 4: Un nuevo poder.


Cuando los cuatro rayos de luz dejaron de brillar, las auras de los demás se hicieron visibles. La de Zydeco era de un azul celeste que provocaba como una extraña deformación espacial. La de Diana era verde oliva y parecía como si estuviera formada por hojas que se agitaban con el viento. La del escudero de Zydeco era de color rojo carmesí y tenia el aspecto de la sangre. Por ultimo, la de Simus era de color marrón y tenia un aspecto oseo. Bepher miró la escena impresionado.

—Vaya vaya vaya. Nunca espere cosa semejante. Esto me va a gustar.

Zydeco corrió hacia Bepher a una velocidad asombrosa. Este tan solo movió a la velocidad de la luz sus colas, pero Zydeco, por increíble que pareciera, logró esquivar sus ataques y cortar las colas. Acto seguido, y sin que a Bepher le diera tiempo de reaccionar, Zydeco cortó con su espada limpiamente sus brazos y piernas.

—Atrévete a levantarte ahora demonio —Dijo Zydeco sonriendo.

Sin embargo, Bepher se rodeó de un aura oscura y sus brazos y piernas se volvieron a juntar con su cuerpo mientras le crecían nuevas colas.

—Bien bien. Me gustan tus nuevos poderes. Interesante.

Bepher lanzó una onda que Zydeco casi logró esquivar. Su brazo derecho sufrió el envite del impacto, pero por alguna razón, las heridas se regeneraron al instante.

—¿COMO? ¡¡ES IMPOSIBLE!! ¡¡TUS PODERES NO HACEN ESO COM...!! —Pero Bepher se paró al instante al comprenderlo. El aura del escudero de Zydeco estaba rodeando a los cinco chicos curando cualquier herida que tuviesen.
—¿Que te parece? No solo he mejorado sus poderes. También los he adquirido yo —Dijo Adán.

Acto seguido, Adán se movió a gran velocidad hacia Bepher y le golpeó duramente, lanzando a su enemigo por los aires. El demonio se paró en el aire y rodeando su puño de energía negativa lo lanzó contra Adán, pero este lo agarró y haciendo una pirueta le lanzó una gran patada mandandole a las rocas. Bepher se levantó tras un estallido y sus heridas se regeneraron al instante.

—Creo que voy a tener que ponerme en serio —Dijo Bepher.

Acto seguido creó una gran burbuja oscura que fue cortada de un tajo por Simus el cual ahora su cuerpo parecía el de una persona adulta normal y no la de zombie que tenia antes.

—Es hora de cortarte en rodajas —Dijo Simus.

Este clavó sus espadas en la tierra y miles de estalagmitas brotaron del suelo y empezaron a dispararse en dirección a Bepher. Este creó un escudo oscuro con el que protegerse, pero desde abajo, grandes lianas atraparon sin previo aviso al demonio haciendo que su escudo fallara y que en su cuerpo se clavaran los proyectiles de Simus. Bepher estalló en cólera y la explosión lanzó a los cinco a cientos de metros de sus posiciones originales.

—Muy bien se acabó. No voy a dejar que cinco criaturas insignificantes destruyan mis planes.

Bepher salió despedido hacia Simus, Diana y Jaime y les golpeó con dureza. Sin embargo, gracias al aura del escudero, Diana y Simus recobraron la salud, aunque a Simus le hubiera dado igual, pues se había levantado sin esfuerzo. Adan y Zydeco salieron lanzados hacia Bepher y se enzarzaron en varios golpes y cortes, mientras Bepher les lanzaba ondas oscuras que les dañaban, aunque Jaime curaba sus heridas con su aura. Adán creó de la nada una gran espada y entre Zydeco y el atacaron girando como un torbellino atravesando el ojo central de Bepher. Bepher intentó regenerar esa parte, pero la regeneración iba mas lenta en esa parte.

—Eso es, si ataco en esa zona tal vez pueda dañarlo seriamente —Pensó Adán— Zydeco, ocúpate de Bepher por mi, tengo una idea.

Acto seguido, se acercó a los otros tres mientras Zydeco seguía luchando ferozmente contra Bepher. Jaime se subió a la espalda de Adán y este se elevó en el cielo varios metros mientras empezó a crear diez bolas de energía, cada una con un color distinto que se juntaron creando una gran bola de energía transparente. Jaime le dio la mano a Adan y con la mano libre, el chico curó las heridas de Jaime de forma que pudiera seguir restableciendo sus energías para añadir mas energía al ataque. Bepher se percató de lo que intentaban hacer los dos y salió disparado hacia Adán y Jaime, pero Zydeco y Simus lograron interponerse en su camino y le cortaron en dos pedazos. Sin embargo Bepher se regeneró pronto y su ojo terminó de curarse. Diana, viendo lo sucedido, creo grandes lianas que obligaron a Bepher a caer al suelo. Mientras, Simus y Zydeco volvieron a la carga, pero esta vez Bepher creó otra oleada de energía que lanzó a los chicos al suelo. Dado que Jaime tan solo cubría a Adan, solo Simus se levantó cojeando, pues su pierna había sido destrozada. Bepher dirigió su mirada hacia los dos y se alarmó. Una gran bola de energía se encontraba delante de Adan y el escudero de Zydeco y no paraba de brillar y emitir grandes rayos de energía. La tierra temblaba con gran intensidad debido a la presencia de la energía en la zona.

—Bepher, ha llegado tu hora. ¡¡¡DESPÍDETE DE UNA VEZ!!!

Adan dio rienda suelta al rayo y este cayó con tanta fuerza que la zona se desquebrajó produciendo graves temblores en la zona instantes antes de que impactase. Bepher fue tragado al instante y fue desintegrado, salvó su ojo central debido a que el rayo tenia un hoyo en el centro exactamente igual al ojo de Bepher. Toda la zona estalló y Adán y Jaime salieron disparados hacia atrás, este ultimo muriendo en el acto. Simus, Diana y Zydeco fueron desintegrados al instante mientras la onda expansiva partía en dos toda la zona mientras Europa era pasto del caos y la confusión, partiéndose el continente en dos. Sin embargo, la maquina que tenia Bepher fue destruida y algo extraño ocurrió. El tiempo empezó a retroceder mientras Adán caía agonizante y la zona volvió a la normalidad. Tanto Zydeco, Simus, Jaime y Diana estaban misteriosamente vivos y Adán estaba en perfecta forma física. Sin embargo, no todo había vuelto a la normalidad. La maquina se encontraba destrozada, una gran grieta había quedado en el suelo y un gran ojo se encontraba en el suelo intentando regenerarse. Adán volvió a su segunda forma rápidamente y creó un escudo verde y otro rodeándolo de antimateria para evitar que se regenerara.

—Al destruir la maquina nos hemos salvado. Es la única explicación que se me ocurre para que sigamos todos vivos —Dijo Adán.
—Bueno, es hora de acabar con lo que queda de Bepher de una vez —Dijo Zydeco.

Sin embargo Adán se interpuso a sus intenciones.

—Esto es cosa mía. Diana, te pediría que escribieras lo que ha pasado aquí como una leyenda para que en el futuro sepamos lo que ha ocurrido hoy aquí.
—De acuerdo, así haré. Mis descendientes tendrán la historia —Dijo Diana.
—Creo que me iré a América. Estará bien cambiar de aires ahora que parezco una persona normal —Dijo Simus.
—Yo me iré al centro de Europa. Tengo cosas que hacer allí todavía —Dijo Zydeco.
—Yo iré contigo Zydeco —Dijo Jaime.

Adán abrió un portal.

—Os llevará a donde nos encontramos todos. Yo voy a reunirme con Fate, tengo cosas que atender con el —Dijo seriamente.

Los chicos asintieron y se metieron por el portal. Adán cerró el portal y a velocidad lumínica se dirigió hacia Bargas...

Mientras tanto, en la cueva de Bargas...

—Ya era hora —Dijo Fate al ver a Adán llegar con lo que quedaba de Bepher en la mano.
—Esto no era precisamente un ser humano debilucho con pistolas y cuchillos —Dijo Adán.

Adán apretujó el escudo de antimateria y lo que quedaba de Bepher se transformó en energía. Rápidamente, Adán cubrió la zona con esa energía y la selló en el lugar para que no pudiera salir de la cueva.

—Perfecto. Bepher no podrá salir, pero si darle los poderes a Silveria. La linea temporal esta a salvo. ¿Por cierto como sabias donde estaba la cueva Fate? —Dijo Adan.
—Ah eso. Me lo dijo Bad antes de empezar mi despedida de soltero como estoy haciendo ahora. Y creo que ha terminado. Ya es hora de que regrese a mi época de una vez —Dijo Fate.
—Bueh, grabaré una ultima cosa en la roca y podremos irnos —Dijo Adán.
—Ah por cierto. Recuerda esta conversación. Algún día te sera útil —Dijo Fate.

Adán no comprendió esas palabras, pero asintió...

La misma cueva, seiscientos años después...

—Maldita sea, ¡¡SACADME DE AQUÍ AHORA!! —Dijo una voz de mujer.
—¿Quieres vengarte del que te ha encerrado verdad? —Dijo otra voz muy grave y oscura.

Después de eso se escuchó un tremendo grito agonizante...

En el presente...

—¿Que tal ha ido Adán? —Dijo Drake preocupado.
—Recordáis a Silveria? Pues la criatura original era mas fea que un cardo en un muelle de ratas.
—Me alegro, todo ha salido a la perfección —Dijo Latias— Lastima que no haya podido ver la pelea, esa maquina paradójica no me permitía ver, solo una hora después de la destrucción de esa maquina dichosa he podido ver algo.

Adán agarró las diez piedras y las destruyó.

—¿Que puñetas haces? —Dijo Shayks.
—Fácil. Pude volver atrás en el tiempo gracias a las piedras y poder curarme a mi, a los otros cuatro y restablecer los daños a Europa y todas las posibles victimas que hubiera causado mi ultimo ataque. Si las he destruido es por su poder. Si alguien lograse adueñarse de estas piedras, podría ser una seria amenaza.
—Bueno. Shayks, Ikeria, podéis quedaros en la central de la CIA. Allí nadie os molestara y podréis llevar una vida tranquila —Dijo Lemmon amablemente...

En el futuro, 22 años después...

—Vaya ya has regresado —Dijo un chico.

Sweet se secó las lagrimas de la camiseta. Al lado del chico había otro chico algo mas bajo y una chica de pelo largo y moreno de ojos verdes.

—Si. Estoy lista. Ah por cierto, te he tenido en brazos.
—Eso si que es gracioso. Porque yo hice lo mismo el día que naciste tu renacuaja.

Sweet le sacó la lengua mientras el otro chico se impacientaba.

—Black, si no nos damos prisa llegaremos tarde. Todos están allí ya a punto de entrar a la zona.
—De acuerdo. Vamos Sweet. Es hora de vengar a nuestro padre...

No había posteado para agradecer y felicitarte, pero lo hago ahora.

Solo recalcar que fue un poco corta.