Bumpeado xd

Cap 1. (piloto)

Ciudad Larousse. Es un día festivo, las calles se han vestido de luces, música y diversión. El alcalde de la ciudad se dispone a hablar en un estrado en la plaza a toda la ciudad.

-Dicen que estamos solos. Que nuestro planeta, grande y bello, es el único que alberga vida. Pero sabemos que no. Lo sabíamos desde hace muchos años. Esa noche cayó desde el cielo un meteoro, y dos leyendas lucharon, para volver a luchar 4 años después, y el mal caído del cielo se fue. Nadie sabe donde, pero hay quién dice que huía de nuestro protector.

De esto que cuento ya pasaron 6 años, pero aún nos acordamos a día de hoy. Hoy, elogiamos a Rayquaza, quién intentó defendernos, y recordamos al extraño pokemon espacial llamado Deoxys, que intentó destruirnos.
- ¡¡Eso es mentira!! –gritó un chico entre la multitud- ¡¡No sabéis nada, ninguno sabéis nada!! ¡Deoxys no quería destruir a nadie!

- ¡Alborotador detectado! ¡Procediendo a intercepción!- dijo una voz computada. Acto seguido varios robots-cubos rodearon al chico y lo elevaron a los aires.
-¡Soltadme, soltadme! ¡No he hecho nada malo!
- Oye,-dijo una chica a otra- ¿no es ese de ahí arriba ese tal Tori?
- ¿Tori?

Tori tenía ya 16 años, vestía con ropas a lo rebelde, con cadenas incluidas, y tenía el mismo pelo cián de siempre. Se lo llevaron volando hacia comisaría, y lo metieron en una celda.
-¡Malditos robots dejadme en paz! –los robot le lanzan a la celda, la cual se cierra al instante con barrotes láser.
- Te quedarás ahí hasta que venga alguien a recogerte –dijo un robot-cubo, y se fueron.
- Mierd@...
20 minutos más tarde, desaparecen los barrotes.
- Ha venido alguien, puedes irte –dijo un guarda-cubo. Tori salió de la comisaría, y fuera le esperaba una joven pelirroja con ropa bastante infantil para su edad, 17.
- Hey, ¿que tal estás Tori? ¿te lo has pasado bien? –dijo la chica.
- No seas pesada, Rem.-[/i]refunfuñó Tori con la cabeza bajada y caminando[/i]- Sabes muy bien que no.
-Bueno, te lo digo porque como ya es la...creo que la 8ª vez que te meten en la cárcel este año, te habrán hecho algún “descuento” o te habrán dado un cheque ahorro, ¿no, Tori?-sonrió Rem siguiéndole.
- Ja-ja, que gracioso...es lo más gracioso que he oído en todo el día, me tienes que decir de donde sacas tus chistes.
- Eh, que no te gusten mis bromas no implica que tengas que burlarte de mi, bastardo.
- Pues no haberla hecho, tras salir de la cárcel no es que esté de muy buen humor, Rem.
- ¡Es que te lo has buscado tú solito, tontaina! Mira que decir eso en mitad del discurso...
- Tori levanta la cabeza y grita- ¡¡¡PERO SABES QUE TENGO RAZÓN, REM, SABES QUE TENGO RAZÓN!!!
Rem se queda asustada. Tras unos segundos de silencio, resopla y dice:
- Ves, por eso odio a los hombres...soys todos unos machistas y unos agresivos.-acto seguido se va.
- Rem perdona, yo no quería...-resopla-...que tonto he sido. Mejor vuelvo a casa.

Ya en casa, los padres de Tori le riñeron, ya que su grito estaba en las noticias. Tori les ignoró y se fue dando un portazo de casa, hacia un parque. Se sentó en un banco y allí saca a su Minun y a su Plusle de sus Pokeballs.
- Chicos...¿he hecho mal en gritar eso? No se, es que no he podido evitarlo...bueno ningún año puedo evitarlo ni en ninguna situación, pero es que tengo razón! Vosotros sabéis al igual que yo que Deoxys no venía a hacernos daño, solo buscaba a su amigo...al igual que yo sabéis que esta fiesta es una estupidez como un pino. ¿Por qué celebrar una victoria que nunca ha existido? En fin, vayamos al campo de entrenamiento a pelear un poco, ¿de acuerdo chicos?- los pokemon gritaron alegres y subieron cada uno a un hombro de Tori.
Subió a una cinta transportadora con dirección al campo de entrenamiento, y en la cinta se encuentra con Roberto. Era un chico regordete, misma edad que Tori, con pelado militar y ropas con varias tallas de sobra al que le gusta bastante incordiar.
- Eeeh eeeh eeeeeeeh!! ¿¿Tori que tal estás?? He visto en las noticias que te han arrestado...otra vez jajajajajaja.
- No seas pesado Roberto, voy a desahogarme en el campo de batalla.
- ¿Ah si? Venga ya, pero si eres pésimo. Al mínimo golpe ya no sabes que hacer.
- ¡¡Roberto!!- gruñó levantando el puño Tori.
- Eh, si vais a entrenar, sabréis quien está allí también, ¿no? –interrumpió un chico de unos 10 años.
- ¿Quién? –preguntó Tori.
- ¿Cómo? –dijo sorprendido el chico- ¿no lo sabíais? ¡Dicen que un antiguo líder de la liga de Kanto está allí buscando retos! ¡Yo voy para luchar con él!
- ¿Un líder dices? –dijo Roberto- Oye, chaval, será mejor que no luches con él, seguro que es muy fuerte.
- ¡Mi Nidorino puede con cualquiera!
- Nidorino. Crees de verdad que puedes vencer a un líder con sólo un pokemon. Mira, eso es imposible –admitió Roberto-, además, aunque tuvieses oportunidades, se necesitan 3 Pokemon para retarse.
- Si, esa es la norma. –confirmó Tori.
- Buaaaaaaaah!! ¡¡P-pero yo quiero luchar, y ganarle!! -lloriqueó el niño- ¡¡Buaaaaahhh!! ¡¡Mamáaa!! –gritó, y saltó a otra cinta transportadora.
- Vaya llorica. –dijo Roberto.
- Ya pero solo es un chaval.-contestó Tori- No sabe nada de normas y eso...¿será verdad que allí hay un líder?
- No se. –dijo Roberto- Ese criajo seguramente se lo ha inventado, tío...¿o no?
- Habrá que ir a ver.

Continuará. Perdón, este fic tiene mucha conversación...el próximo capítulo tendrá menos ;)

Vaaaaaya. Menuda acogida ha tenido mi fic. Supongo que los anteriores tenían más "gancho", ya que trataban de historias en regiones nuevas. Pero bueno, yo seguiré con el fic

Cap 2- ¿Que hace ahí Rem?

Tori y Roberto siguieron su camino hacia el campo de entrenamiento. El campo de entrenamiento estaba en un gran parque situado dentro de uno de los muchos rascacielos de la ciudad, las puertas del campo la presidían estatuas de Rayquaza que, a modo de enredaderas, bordeaban desde un lado a otro las puertas. Tori y Roberto ya habían estado muchas veces allí, así que no se fijaban en estas cosas, pero si se fijaron en la cantidad de gente que había allí, no cabía casi un alfiler. Tori sugirio a Roberto que quizás el chico de antes tenía razón y había un autentico líder de la liga Kanto. El interior eran 3 campos de batalla al estilo clásico, 2 de ellos tapados por la gente, y las paredes estaban decoradas al estilo barroco, con grandes columnas llenas de pequeñas y grandes esculturas de pokemon, además de varias personas que habían escalado para ver mejor. Roberto, aprovechando su corpulento físico, fue abriéndose paso junto a Tori entre la multitud.
- A ver, -decía Roberto mientras hacía hueco- déjenme pasar, gracias calvo, gracias vieja, perdone, paso idiota, paso, gracias por dejar que te empuje, apártense...
- Roberto, ¿no crees que podríamos pasar sin empujar? -preguntó retóricamente Tori
- ¿No crees que deberías callarte? Quién eres tu para darme ordenes tontín, ¿a que te doy? -dijo levantando la mano
- Perdona, perdona...¡mira, ya estamos en primera fila!...Roberto, no hace falta que sigas empujando.
- ¿Em? Ups...vaya con la valla xDD -dijo tras darse cuenta de que había empujado también una valla.-..aivá, ¡pero si es!
- ¡Es Lance!...y esa es...¿que hace aquí Rem?

Allí estaba, en el campo de batalla central, luchando la persona menos esperada, Rem, contra Lance, el antiguo miembro de la élite de Kanto, experimentado domador de Pokemon Dragones, vistiendo con un traje violeta y una capa estilo dragón roja. Rem había elegido a un Kirlia, y estaba esperando a que Lance eligiese su pokemon.
- Con que un Kirlia, bueno,- dijo Lance metiendo la mano en el bolsillo- te mostraré una de mis nuevas capturas.
- No me sorprenderás, se que vas a sacar un dragón. -contestó con despecho Rem.
- Si, es cierto -declaró Lance cogiendo una pokeball-. Solo que no es un dragón común, ¡vamos, joven Vibrava! -lanzó la ball y un Vibrava apareció.
- ¿Un Vibrava? Parece más un pokemon bicho más que un dragón...¿no? Es enano jajaajaja
- Grr....Vibrava, demuéstrale de lo que eres capaz, ¡Dragoaliento! - Vibrava carga energía y la lanza rápidamente como llamas azules.
- Relim, ¡Doble Equipo! -Kirlia crea reflejos de su cuerpo y evita el ataque.
- Hum, eso no te servirá de nada, ¡supersónico Vibrava! -el Vibrava agita sus alas rápidamente y crea ondas supersónicas. Todos se tapan los oidos, y el verdadero Kirlia queda al descubierto y mareado. - ¡Y ahora usa Triturar! -Vibrava se lanza contra Kirlia y lo muerde salvajemente. Kirlia cae debilitado-
- ¡Relim! -gritaba Rem corriendo hacia su pokemon- ¡Relim! ¡Mi niña! ¿Que te ha hecho ese bruto? -se arrodilla, abraza al Kirlia y una lágrima sale de sus ojos- Anda...vuelve a tu pokeball...- Rem devuelve a Kirlia a su ball, y se queda en el suelo arrodillada y con la cabeza baja.
- Hum...bueno...- decía Lance- digamos pues, que no estabas al nivel de un líder, no estes triste.
Rem sigue en el suelo. Su cara expresa tristeza, pero rápidamente es cambiada por furia. Cierra el puño, se levanta y grita:
- ¡¡MACHISTAAA!! ¡Le has hecho eso a Kirlia solo porque es una chica!, ¿¿no?? Ahora vas a tenértelas con un hombre también -mete la mano en el bolsillo y muestra una acopioball- ¡¡TOMA ESTO!! -lanza la acopioball y le da en la cabeza a Lance, y sale otro Kirlia de ella. Era un Kirlia distinto, con el pelo hacia atrás y la falda más corta, casi pegada al cuerpo.
- ¡¡Auch!! ¿Pero que haces? ¡Mira que tirarme la ball en la cabeza! ¡Y encima es otro Kirlia!
- Kukuku...- sonrió Rem- No es otro Kirlia...es EL KIRLIA. ¡Kirlock, demuéstraselo a este cobarde, Confusión!

El Kirlia pone sus manos en la cabeza y cierra los ojos, y en un parpadeo cambian a un tono amarillento. Vibrava se ve atrapado en una especie de campo de fuerza, y Kirlia lo eleva bastante alto, para lanzarlo violentamente contra el suelo. Vibrava cae y hace un pequeño cráter. La gente se entusiasma.
-Vaya.- se sorprendió Lance.
- ¿Has visto eso? –decía Roberto a Tori- ¡Rem ha tumbado a un pokemon de auténtico maestro!
- Si...Rem es así. Ya sabes que Rem parece débil, pero es fuerte cuando lucha contra un entrenador.
- Ya veo, está igual que cuando lucha conmigo. O con cualquier entrenador. O con cualquier chico. Dice las mismas cosas, “que si machista, que si te denunciaré”...¡aaaah, no la soporto! ¡Pero lo que menos soporto es que si hable a veces bien contigo! ¿por qué? ¿Qué tienes tú? ¡No habla bien ni con su padre, pero sin embargo contigo...contigo!!- gritó Roberto levantando a Tori por la camisa.
- Eeeh, Roberto...sigamos viendo el combate.
- Aah, si, es verdad –recordó Roberto, y soltó a Tori.

- ¡Bieeeen! –sonrió Rem- ¿Qué te ha parecido eso, eh machote? Ya no eres tan fuerte, ¿verdad viejo?
- ¡¡!! ¿¿VIEJO?? -se enojó Lance- ¿VIEJO HAS DICHO? ¡Ahora te enseñaré a no insultarme más, criaja! –saca dos pokeballs- ¡Vibrava vuelve! ¡Dragonite, adelante!!
Lance lanza con furia la pokeball, golpea en el suelo y se abre. Una gran figura aparece y empieza tomar forma lentamente, y finalmente se convierte en un pokemon. Aparece con los ojos cerrados, las alas pegadas y agachado, pero en un momento abre rápidamente los ojos, se pone en pie, extiende las alas, flota, da una vuelta sobre si mismo y ruge, un rugido atronador que hace que todos se tapen los oídos. Definitivamente, Dragonite ha aparecido.
- Eso es...¿un Dragonite? -dijo asustada Rem.
- ¡Efectivamente! –afirmó Lance- Y está muy enfadado por lo de antes, ¿verdad Dragonite?
- ¡¡¡¡DRAAA!!!!
-¡Dragonite, HIPERRAYO!

El Dragonite cargó de energía su boca, y la lanzó. Una luz cegó a todos los presentes durante unos segundos. Cuando se consiguió ver algo, tanto Rem como su "Kirlock" estaban varios metros alejados del campo de batalla, en el suelo e incoscientes. El suelo estaba levantado por la potencia del Hiperrayo de Dragonite, y había una columna derrumbada y hecha añicos, seguida de una pared a puntos de derruirse. La gente gritó y aclamó a Lance y su Dragonite por la victoria. Tori y Roberto corrieron a ayudar a Rem.
- ¡Rem! -gritó Tori corriendo. Acto seguido se agachó delante de Rem.- ¿Rem, me escuchas? ¿Rem estás bien? -Rem abre ligeramente los ojos.
- ...To...ri...Ro...berto......soys...unos...machistas.-balbuceó Rem, y se desmayó por completo-
- Vaya, que sorpresa. Hasta antes de desmayarse sigue siendo borde.-comentó Roberto.
- Déjate de tonterías por ahora, hay que llevarla a un médico o algo.
- ¡Si, claro! Súbela sobre mi espalda

Continuará..
Próximo capítulo: Era inevitable

¡Proximamente se incluirán dibujos!

Solamente dos fics me gustaron de pokémon, y el resto son apestosos. Pero este es una excepción, ya que no se trata de un viaje mal descripto, no está escrito como guión lo cual es FABULOSO, solamente te falta describir más, pero tampoco cada detalle para dejarle al lector imaginarse el resto.
Que no aparezcan los iconos pokémon también es algo genial.
Seguí el fic, es original, y despierta duda sobre Deoxys y su historia...aunque algún ser malvado debe aparecer.

Ufff. este capítulo es laaaaaaargo largo. Así que mejor lo dividiré en varias partes, para que no se haga muy pesado.

Cap 3. Era inevitable (parte 1)

Tori agarró de la cadera a Rem y la puso sobre la espalda de Roberto, acto seguido sacó de las manos de Rem la acopioball y devolvió al malhreido “Kirlock” a su ball.

Ya en el hospital, llevaron a Rem a una habitación, y a sus pokemon al Centro Pokemon del hospital. Tori y Roberto se quedaron fuera de la habitación esperando noticias, hasta que una enfermera Joy informó de la situación: Rem estaba bien, solo eran pequeñas magulladuras, al parecer su desmayo se debió a causas psicológicas, posiblemente por un susto, el Hiperrayo solo le rozó un poco, pero aún así debía quedarse un día allí para recuperar energías. Pero el caso de su Kirlia era más grave: el primero estaba debilitado, y se recuperaría descansando también, pero el que recibió el Hiperrayo estaba muy grave. Al parecer el ataque le había dado de lleno, y uno de sus brazos estaba inmovilizado, sin posibilidad de volver a moverse. Además, debieron introducirle en una cámara de hibernación especial para evitar que las demás heridas siguiesen abriéndose.

- Espere un momento, ¿uno de sus brazos está paralizado? –se sorprendió Tori- ¿No se recuperará si usamos Antiparalizante sobre él? Unas cuantas gotas y...
- ¡No es tan fácil! –interrumpió Joy- No he dicho que estuviese paralizado, sino inmovilizado, es decir, no se mueve. Parece ser que el Dragonite dañó la columna del Kirlia y ha anulado el contacto con su brazo izquierdo, es decir, no puede moverlo, no hay cura médica para ello.
- Y...dice...¿que está tan mal? –dijo una voz tras ellos.
- ¡Rem! –exclamó Roberto- ¿Qué haces levantada? ¡Necesitas descansar más!
Rem, mareada y magullada, se había levantado de la cama al escuchar la situación de su Kirlock. Cojeaba y andaba apoyándose en las paredes, con los ojos mediocerrados, como cegados por la luz.
- No puedo...no descansaré...mientras Kirlock este así...aaah...-las energías abandonaron a Rem, y se desplomó.
- ¡Rem! –gritó Tori cogiéndola antes de que se cayese.
- Dejádmela a mi, la meteré de nuevo en su cama.-dijo Joy- Iros a vuestra casa, sus padres deberían llegar ahora, ellos se encargarán.
- No, debemos quedarnos, no vendrá nadie. –dijo Tori
- ¿Cómo que no vendrá nadie? –se sorprendió Roberto- Son sus padres, por favor, seguro que vienen.
- ¿No lo entiendes? Rem no tiene padres.

Se hizo un silencio. Durante unos segundos, todos sintieron el tiempo pasar más despacio, como si un viento gélido y frío recorriese sus cuerpos comenzando por el estómago y extendiéndose como una onda expansiva. Las palabras se atragantaban en la boca de cada uno, no había nada que añadir, como si tuviesen un luto interno, un voto de silencio que no les dejaba expresarse lo más mínimo, solo miradas hacia abajo. Finalmente, Joy reaccionó, metió a Rem en su cama y permitió a los chicos quedarse, ella debía atender a otros. Pasaron varias horas. Tori y Roberto esperaban alguna novedad de Rem, que descansaba en la cama frente a ellos. Roberto tuvo que despertar varias veces a Tori, y a la tercera vez:
-Tori...Tori que te duermes otra vez –dijo Roberto, golpeando a su compañero.
- ¿Aam? Hum..si, perdona. Estaba pensando.
- ¿Pensando? Más bien diría que estabas roncando. Ah, por cierto, tu Minun y tu Plusle se han ido abajo otra vez. La cocinera los trajo de nuevo para que los controles, dice que la próxima vez que bajen para comerse los helados, habrá un plato especialmente eléctrico, ya sabes por donde voy...
-¿Es eso verdad? –preguntó enfadado Tori a sus 2 pokemon, y se hicieron un mohín asustados. Saca dos balls- Se acabo, volved a vuestras pokeballs...no puede uno siquiera perderles de vista un segundo, siempre se meten en líos.
- Jaja, lo mismo me pasaba a mi con Rattata, -admitió Roberto- pero tras evolucionar dejó de hacer esas trastadas, y se le quitó ese dichoso puntito que tenía en al cola. Por cierto, hablando de evolución...¿Minun y Plusle pueden evolucionar?
- Tengo entendido que no pueden, pero quien sab-....un segundo, ¡eso es! –exclamó Tori levantándose de la silla.
- ¿El que?
- ¡Ya se como curar al Kirlia de Rem! Solo necesitamos una piedra Alba.
- Ya entiendo, lo evolucionamos y así quizás se cure. ¡Como pasó con el puntito de Rattata! Eres un genio, Tori. –felicitó Roberto, levantándose también de su silla.
- Exacto. Pero hay un problema. Quizás Rem no quiera evolucionar a su querido...¿Kirlock era?
- Pues vaya. –se decepcionó Roberto sentándose de nuevo- Has hecho que me ilusione para nada. Tienes cada idea...
- Si... –murmulló Rem.
- ¿Está despierta? –dijeron los dos acercándose hacia la cama.
- Si...ayudadle. Evolucionadle...Iros, estaré bien...cualquier cosa...con tal de curar a mi niñito.
- Esta bien, Rem. Lo haremos, evolucionaremos a tu Kirlia. –confirmó Tori.
- Se llama...Kirlock...idiota. –acto seguido se volvió a dormir.
- Huuummm...lamento ser repetitivo, Tori, pero Rem es borde en cualquier situación. –Tori lanzó una mirada asesina a Roberto- ¡Pero si es verdad!

Parecía fácil, cogen una piedra Alba, se la dan al Kirlia, evoluciona, se cura, y todos felices de nuevo (bueno, más o menos). Pero no es tan simple, las piedras Alba no crecen en los árboles. Pero se pueden encontrar en los centros comerciales al módico precio de...
- ¿¿52.008 pokes?? –gritó Roberto-
- Oui, monsier. –contestó un dependiente con bigote francés y esmoquin- Es un agtículo de lujo, muy cotizado entje gjandes coleccionistas, y muy gago de encontgag. Fue extgaída de las altas cumbges del imponente Monte Cogona, bajo el manto de goca, además de que..
- Olvídelo, oiga. No podemos pagar tanto.
- ¡¡Entonces fuega de mi tienda, cgiajos!!

Continuará...
Próximo capítulo: Era inevitable (parte 2)

La trama se complica cada vez más...¿que pasó con los padres de Rem? ¿De donde sacarán los pokes para la piedra Alba?

Dudaba de añadir la siguiente parte, porque pocos comentais, pero bueno...

Cap 3. Era inevitable (parte 2)

El dependiente empujó a Tori y Roberto fuera de la lujosa tienda, hasta echarlos fuera y acabar por decir “y no volváis más”. ¿De donde sacar ahora una piedra Alba para Kirlock? Se sentaron a tomar un refresco y pensar en ello en el exterior de una de las muchas cafeterías de los centros comerciales. Era una cafetería típica, con sus sombrillas en el exterior, a pesar de que hubiese más de 700 toneladas de techo que impedían la entrada a la luz natural (típico).

- Sabes Roberto, con el dinero que perderemos por estos refrescos estaremos un paso más lejos de conseguir la piedra Alba.-dijo tristemente Tori, mientras miraba a Roberto sorber de su lata.
- Déjate de tonterías, Tori, sabes que ni en sueños conseguiríamos esa cantidad de pks, además, quizás encontremos algún entrenador que nos de una piedra Alba tras vencerle.
- ¿Eso crees tú? –refunfuñó Tori- ¿Pero has escuchado acaso lo que ha dicho el bigotudo ese? Dijo que esas piedras son muy difíciles de conseguir, que estaban en el Monte Corona. Pocos entrenadores llegan allí, y menos encuentran piedras albas, y mucho más difícil sería que la apostasen en un combate, por no hablar de que si lo hicieran, y diese la remota casualidad de que tal entrenador nos retase, sus Pokemon estarían a un gran nivel y nos sería imposible vencerle...
- Ya, vale, de acuerdo, me has convencido. Pero sabes, buscar los problemas es muy fácil, lo difícil es encontrar las soluciones. –contestó Roberto, poniendo un tono un tanto filosófico.
- ¿De donde has sacado esa frase? ¿Quién eres y que has hecho con Roberto?
- Pues no se de donde la he sacado, pero podríamos aplicarnos el cuento y buscar la solución. -respondió Roberto.

Tras decir eso, un gran ruido de platos rompiéndose y cubiertos cayendo empezó a sonar, seguido de los gritos de los camareros y clientes dentro de la cafetería. Tori y Roberto se levantaron para ver que ocurría ahí dentro, y se asomaron a la puerta. Al parecer, un Rattata estaba causando problemas en el establecimiento. El instinto de entrenador obliga a ayudar por parte de Tori y Roberto.
- ¡Coged a ese Pokemon! ¡Que no escape! ¡Para de una vez!–gritaban los camareros.
- Nosotros nos encargaremos –dijo Tori, con una pokeball en la mano- ¡Vamos Plusle!
- ¡Venga, Raticate! –dijo Roberto lanzando una rapidball. Los dos Pokemon salieron. El Rattata se posicionó para combatir.
- Plusle, ¡descarga!
- Raticate, ¡mordisco!
Raticate se abalanzó contra el Rattata para morderle, pero antes de llegar el ataque Descarga impactó contra él.
- ¿Pero que haces Tori, tontaina? ¡No me ataques a mi! –gruñó Roberto
- ¿Cómo? ¡Pero si ha sido tu Raticate el que se ha puesto en medio de la Descarga! –contestó Tori.
- Eso lo has hecho a propósito, Tori, ¡no te lo perdonaré!
- ¡El que no te lo va a perdonar soy yo! Mira que desconfiar de tu compañero...
- ¿Compañero? ¡Que yo sepa los compañeros no se atacan entre sí!
- ¡Pero ha sido porque tu Raticate se ha puesto en medio, si no hubieses usado Mordisco no habría pasado nada!
- ¡¡TORIII!! –gritó Roberto a punto de golpear a Tori.
- ¡¡ROBERTOOO!! –gritó Tori a punto de golpear a Roberto.
- Esto...chicos...-interrumpió una señora que estaba bajo una mesa escondida- ...¿no deberíais perseguir a ese Rattata que está corriendo hacia fuera?

Los dos reaccionaron, y junto a sus Pokemon salieron corriendo tras el Rattata.
- ¡¡EEEH!! ¡¡Que no habéis pagado la cuenta!! – les gritó un camarero
El Rattata se movía con agilidad, ligeramente por los pasillos de los centros comerciales, con una velocidad endiablada, asustando con gruñidos a todo aquel que se le cruzaba en su camino. Tori y Roberto, junto a su Plusle y su Raticate le seguían de cerca corriendo tras él, hasta que el Rattata llegó a un callejón sin salida, entre 1 pared y dos enormes columnas.
- ¡Ahora no tiene salida, vamos Roberto!...¿Roberto? –Roberto estaba varios metros atrás, sobre su Raticate- ¿Qué te ha pasado?
- Es que...-contestó Roberto jadeando y tumbado sobre su Raticate-...estás carreras no son para mi...
- Ya, ya, claro...¡Plusle, usa Chispa!
Las mejillas de Plusle lanzaron unas chispas, que se unieron y salieron disparadas en una pequeña bola eléctrica a gran velocidad contra el Rattata. El Rattata se giró rapidamente y literalmente bateó la Chispa con la cola, que golpeó contra un foco apagado y lo encendió durante un momento.
- ¿Hum? –se extrañó Tori- ¿Cómo ha podido golpear así la Chispa sin dañarse? Es igual, ¡Plusle, Ataque Rápido!
El Plusle corre velozmente para golpear a Rattata, pero los ojos de Rattata emiten una extraña luz, y una especie de tentáculo azul sale de la boca de Rattata y golpea velozmente a Plusle, lanzándolo contra una de las columnas.
- ¡Plusle! ¿Plusle estás bien?
- Tori, ¿que diablos ha salido de la boca de ese Rattata? –se sorprendió Roberto
- No tengo ni idea, pero no recuerdo que los Rattata tuviesen una lengua tan larga...y tan azul –dijo Tori, observando al Rattata que movía ese extraño apéndice de un lado a otro.
Entonces, alargó el tentáculo y se enganchó a una ventana, y escapó por ella. Los dos compañeros se quedaron patilifusos y mirando hacia la ventana.
- ¡Eh! –llamó una voz cansada, que hizo que se girasen- Al fin os he pillado, chavales.
- ¿Um? ¿Usted no es un camarero de aquel restaurante? –observó Tori.
- Si, lo soy –dijo jadeando el viejo camarero.
- Oiga, viejo, no estas para esos trotes,-decía Roberto- anda que correr detrás del Rattata...
- Pero de que hablas, niño, un respeto, que soy mayor que tú. Vengo para que me pagueis la cuenta, ¡que os habéis marchado sin pagar, sinvergüenzas!...son 14,89 pks por los dos refrescos.
- ¿Ah sí? –se sonrojó Tori- Claro, perdone, aquí tiene.
- Pero tío, ¿en serio le vas a pagar?

Continuará...
Próximo capítulo: Era inevitable (parte 3)

¿Conseguir una piedra alba gratuitamente? ¿Obtener la solución a la parálisis de Kirlock? ¿Un Rattata con una lengua azul y extensible? ¿Acaso se trata de un imitador de Spiderman? ¿A que viene esa pregunta sin sentido?
Las respuestas a estas preguntas y a otras, en la siguiente parte (o no)

varias observaciones:
1.- mmmmm es que es demasiado poderoso xDD
2.- me imagino que habrá que pagar esos refrescos tarde o temprano no?
3.- piedra alba.....mmmmm la encontraran algun dia? XD
4.- (resumiendo): mola el fic, siguelo en cuanto puedas xDD

xD. Al fin un comentario, así que subo la última parte de este largo capítulo que es el 3º. Es una parte algo más corta, porque era lo poco que quedaba del capítulo, aunque lo he extendido un poco para que sea más entendible, y añada más contenido. El capítulo 4 ya está en marcha. Bueno, sin más, la última parte.

Cap 3. Era inevitable (3ª y última parte)

Tori pagó al camarero el dinero de los refrescos, mientras seguía pensando en que diablos había ocurrido. ¿Qué clase de Rattata era ese? ¿Acaso era un pokemon? ¿O solo un Ditto bromista? Fuese lo que fuese, había vencido a Plusle de un solo golpe, y había escapado. Absorto en sus pensamientos, Roberto le hizo reaccionar.

- Eh Tori...¡TORI!
- ¿Ah!? –se sorprendió- ¿Qué ocurre?
- ¿No deberías devolver a tu Plusle a tu pokeball? Está debilitado, habría que llevarlo al Centro Pokemon.
- Es cierto –contestó Tori metiendo a Plusle en su ball-. Vamos.

Entraron en el mismo Centro Pokemon en el que estaba en el hospital donde se recuperaba Rem. Cuando entraron, había una cola enorme en recepción con decenas de entrenadores y no entrenadores con sus pokemon magullados y debilitados. Al parecer, la causa de todos los daños habían sido Rattatas, que al igual que el del centro comercial habían causado problemas, daños a tiendas, hogares y pokemon. En la televisión, se informaba de que casos similares se habían dado en toda Ciudad Larousse, y que los centros pokemon, así como la policía y los robots-cubo, estaban colapsados por el caos.

Tras dejar a Plusle en manos del Centro Pokemon, salieron a fuera y se sentaron en un banco.

- Roberto, ¿crees que Plusle se recuperará?
- No lo se –contestó a Tori-, y la verdad es que no me importa. Mientras a mi Raticate no le pase nada, yo estaré tranquilo. Además, tu Plusle es muy débil ¿no? De un solo golpe se ha debilitado.
- No se para que te pregunto -refunfuñó Tori-...oye, ¿qué crees les ocurre a los Rattata?
- Pues, si quieres que te lo diga –admitió Roberto-, ni lo sé ni me importa. Quizás sea época de cría y estén saliendo a comer, no lo sé.
- Pues deberías preocuparte, después de todo, tu Raticate es un Rattata en base, así que podría descontrolarse o algo, ¿no?
- Mira, sabes lo que te digo –respondió levantándose-, que me voy a mi casa.
- ¿Qué? ¿De que hablas? ¿Cómo te vas a ir? Aún tenemos que conseguir la Piedra Alba para curar al Kirlia de Rem, además ¿acaso tienes algo mejor que hacer?
- La verdad, si, tengo cosas que hacer, -contestó Roberto- a estas horas había quedado con algunos colegas para salir, y seguro que están esperándome, así que me voy.
- ¿Cómo? ¡Debes ayudarme! ¡No puedes hacer eso!
- Puedo y lo haré, ¡nos vemos, tontorrón!

Tras esa despedida, Roberto se fue. Tori se quedó con las palabras en la boca, sin saber que hacer. Así que tomó ejemplo y volvió a su casa, andando, ya que muchas de las cintas transportadoras y de los ascensores estaban desconectados por culpa de los Rattata. En casa, sus padres le riñeron de nuevo, enfadados y preocupados a la vez, porque los Rattata podrían haberle dañado. Entro en su cuarto y conectó la contraseña de su puerta para que no entrase nadie más, y se sentó en su cama, y justo cuando lo hizo, su PC comenzó a sonar.
- “Tori, tienes un nuevo mensaje, Tori, tienes un nuevo mensaje”
- ¿Um? Abrir mensaje –ordenó Tori, y la pantalla holográfica comenzó un vídeo-
- Hola, -se presentó un Blissey digital- soy el sistema automatizado de avisos del Centro Pokemon 032 de Ciudad Larousse. Correspondiendo a la solicitud Y83506J, referida a un Plusle propiedad de Tori Lund, se le hace saber que su pokemon está totalmente recuperado y en perfectas condiciones. Se ruega que, si por error este no fuese su pokemon, lo haga saber, por favor.
- Si, es mi Plusle, gracias.
- Confirmado el análisis de voz, borrando mensaje, procediendo al envío, recibiendo datos, confirmado, pokemon Plusle, manténgase atento a su receptor de pokemon y no introduzca ningún objeto en él...
Tori se levantó de su cama y se puso frente a una especie de tubo con un pequeño boquete en el que fácilmente cabía una mano. Una luz iluminó al tubo, y tras desaparecer esa luz, la pokeball donde estaba Plusle apareció dentro. Tori la recogió, sacó a Plusle y Minun salió de su ball, y ambos se saludaron felices. Pero, entonces, los ojos de Plusle se tornaron a blanco, y comenzó a caer al suelo, en una caída en la que el corazón de Tori y Minun se encogieron, y finalmente cayó al suelo fulminado ante la mirada atónita de su hermano y su dueño.

- ¿Plusle? -se asustó Tori mientras movía a Plusle junto a Minun para hacerle reaccionar- ¿Plusle que te ocurre? ¿QUE TE PASA PLUSLE? ¡¡¡PLUSSLEEE!!!

Primero el Kirlia de Rem queda medio paralizado, y ahora Plusle está...no, ¡no puede ser! Y sin Roberto como ayuda, ¿como encontrará la Piedra Alba para el Kirlia?

Seguirá en el Cap 4: Un día muy difícil

Editado, había errores xD

uau
igual el se ha quedado impresionado de ver a Tori xD

y en cuanto a la piedra Alba.....si le tocara en una loteria seria una sorpresa xD

p.d.:ciudad larousse...eso suena casi como Ciudad Diccionario xDD

en fin, ta muy entretenido, siguelo pronto xD

Os presento la rama sentimental y juerguista de Animally, pero mejor aún, en un nuevo capítulo.

Actu: Corregido error gramatical, gracias a Xelaoen por cometarlo ^^.

Cap 4. Un día muy difícil

El pobre Plusle no se movía, casi ni respiraba, y a veces temblaba, como si le dieran calambres eléctricos. Tori y Minun incluso lloraban al no saber que hacer. Por su parte, Roberto fue con sus colegas, tal y como había dicho, y acababa de llegar a una pizzería en la que quedaron para comer. Sus amigos le esperaban.

- Joder, ¿también han atacado a tu hermana? -dijo uno con piercings por casi toda la cara y las paletas muy grandes-
- Si, la pobre está con mi vieja un Centro Pokemon, -contestó otro con melena negra y alborotada - no recuerdo cual era, pero seguro que la tonta de mi hermana está lloriqueando por su Pidgey.
- Dense cuenta ustedes, a mi por por poco me atacó uno de esos Rattata.-dijo uno con pelo largo y rubio y con gafas de sol- ¡Aivá! ¡Roberto, vos ya se dejó caer por acá!
- Que tal –saludó Roberto, y acto seguido se sentó junto a sus amigos-
- Joder, Roberto, si que has tardado, -habló el flacucho con piercings- deberías dejar de comer tanto, eres más lento que un caracol cojo, JA!
- Si, Vicet tiene razón, que pasó Roberto, ya entró bastante la tarde. -preguntó el rubio-
- Bah, no ha sido nada Samu, ese estúpido de Tori me ha hecho acompañarle a buscar una Piedra Alba.
- ¿Tori? –preguntó el melenudo- ¿El hijo del profesor Lump? ¿Ese no es el que se dedica a gritar todos los años durante la fiesta de Rayquaza?
- Si, si, ya se quién es,-afirmó Vicet- un chico con pelo azul, ¿no?

Roberto explicó a sus amigos, Samu, Tomy y Vicet, lo que le había sucedido, sobre Rem, sobre el Kirlia, los Rattata y demás.

- Entonces a vos también le atacaron esos bichos...-dijo Samu-
- Joder, esto ya pasa de castaño a oscuro, esos bichos no tienen perdón, pase que atacasen a la hermana de Tomy, o que fulminasen al Plusle de Tori, pero que hagan daño a uno de nuestro grupo...¡se merecen morir!
- ¡Eh! ¿Es que no te parece razón suficiente que atacarán a mi hermana, eh Vicet?
- La verdad –concretó Roberto- es que no me han atacado, tíos, solo...
- Eso no importa, Roberto –interrumpió Samu-. Si alguien intenta siquiera dañar a alguien de nuestro grupo, sufrirá las consecuencias.
- Entonces ¿que hacemos, Samu? –preguntó Vicet-
- Está clarísimo Vicet, lo mismo que hacemos siempre en estos casos. Roberto, vos va a ahorrarse el comprar una pizza...el Equipo Atronador se va a cazar Rattatas esta noche.

Tori salió corriendo de su habitación con Plusle en sus brazos, e ignorando a sus padres que le preguntaban donde iba, se dirigió al Centro Pokemon más cercano, con Minun persiguiéndole. Allí, la enfermera Joy simplemente le inyectó un calmante a Plusle, y entonces se relajó y respiraba bien. Le explicó que seguramente se debía al traslado desde el centro hasta su casa, aunque esa noche se habían dado más casos de este tipo debido al alto número de dañados por Rattata, y le recomendó volver a casa. Tori devolvió a Plusle y Minun a sus pokeballs, y decidió ir a visitar a Rem al hospital. Ni siquiera sabía lo que hacía, simplemente decidió hacerlo. Entró en la habitación donde Rem descansaba, con cuidado para no despertarla abrió lentamente la puerta, pero Rem estaba despierta, mirando por la ventana de la habitación con la típica bata con la que visten los enfermos. Se quedó en la puerta sin saber que hacer, si entrar o salir.

- ¿Vas a entrar, o solo eres un pervertido? –dijo Rem sin girarse, con voz ahogada-
- Perdóname, no sabías que estabas despierta.
- ¿Tori? ¿Eres tú? –dijo mirando hacia la ventana, sin girarse- ¿Habéis conseguido la...la piedra Alba?
- No, Rem, -dijo acercándose- no hemos podido, hemos tenido problemas. –Tori observó que había gotas de agua en el suelo bajo Rem. Se hizo un silencio breve- Rem...¿Estás...llorando?
- Mrm...no...no estoy llorando –dijo secándose las lágrimas con la mano, luego se gira y sonríe- ¿Ves? No me pasa nada.
- Si, de acuerdo –mintió Tori, que aún veía los ojos mojados de Rem-
- ¿Entonces que haces aquí, Tori? ¿Solo has venido para verme? –preguntó mientras se limpiaba los ojos-
- Bueno...pues no se...la verdad, mi Plusle estaba mal, lo han curado pero luego...no se por qué estoy aquí.
- Los hombres sois ridículos, no sabeis ni porqué haceis las cosas.
- Y...¿qué tal está Kirlock?

El corazón de Rem dio un latido profundo, y se mordió los labios. Se limitó a decir “no quiero hablar de eso”, y se tumbó en la cama. Tori intentó hablar con ella, pero le dijo que se marchase. Cerró la puerta, y se quedó fuera, apoyado sobre la puerta, sin saber que sucedía, ni como arreglarlo, con un mal sabor de boca y una extraña sensación por todo el cuerpo, se sentó, sin pensar en nada más.


Pobre Rem, ¿conseguirán algún día recuperar a su pobre Kirlock? ¿Y que hay de Roberto y sus amigos? ¿Que piensan hacer con los Rattata?

Quizás se encuentren respuestas, o incluso nuevas preguntas, en el Cap 5: De cacería

o.o a saber como estara kirloch.....o el kirlo xD
ay, vaya con Rem, que rebelde xDD pero pobrecilla..aver si se recuperan pronto todos...

siguelo pronto el fic pronto xD

Intento que la historia cuente lo que hace cada uno. Ahora daremos fin a lo que yo llamo "la fase 1" o fase de la ignorancia, y pasaré a narrar los sucesos Fase 2 iniciada.

Acción y velocidad, son la promesa de este capítulo.

Cap 6. Carrera inesperada.

El Illumise de Tomy convenció los Rattata de que no eran una amenaza, y estos se relajaron.
- Habría que llevar a ese rápidamente –comentaba Samu- a un Centro Pokemon, esa herida no tiene buena pinta. Tomy, cogé al Rattata, tenemos que llevarlo.
- Joder -dijo Vicet- , ¿os habéis olvidado que llevamos toda la noche para buscar a esos Rattata y macharlos? ¡Esto es justo lo contrario!
- Si -admitió Samu-, ya nos dimos cuenta, pero ahora lo que importa es sanar a este, estos no son esos monstruos.
- Pues si queremos salir –sugirió Roberto-, lo mejor sería seguir hacia delante, hay un sumidero que tiene una escalinata que lleva directamente al lago del parque central.
- Joder, ¿Y tu como sabes eso? –preguntó Vicet.
- Mi padre trabajó remodelando el alcantarillado hace 3 años –explicó-, y tuve que estar unos cuantos días con él.

Tomy se agachó e intentó coger al Rattata, pero al moverlo este dio un gemido, así que procuró no tocar la herida y agarrarlo con cuidado. Los otros 4 Rattata los seguían de cerca mientras seguían avanzando por las alcantarillas. Cada vez había más destrucción en las alcantarillas, y la zona parecía más inestable, pero no había ni un solo Pokemon exceptuando a esos 5 Rattata. En un momento dado, comenzaron a escuchar unas voces que provenían del fondo. Se quedaron quietos, atentos. Las voces se acercaban rápido, con pasos ruidosos, y al final se podían ver sombras que corrían h acia el lugar, viniendo desde una esquina. Cada vez se hacían más pequeñas, y se podía distinguir un grupo de personas en la silueta de la sombra. Entonces un grupo de unas 8 chicas vestidas de amarillo aparecieron, corriendo hacia los chicos, con una vestida de naranja en cabeza.

- ¡¡Pero que haceis ahí parados!! –gritó la de naranja, con una diadema en forma de orejas de Raichu sobre su pelo negro y alborotado- ¡¡Corred, estúpidos, huid!!
- Esa chica...-dijo Vicet- joder, Tomy ¿esa chica no es tu hermana mayor, Maya?
- Si, -afirmó Tomy- la misma tonta.
- ¡¡ Tomás Uliem!! ¡Te he dicho que corras! ¡Y vosotros también!
- Esperá, hermosa,-dijo Samu deteniéndola- a que viene tanta prisa, no hay razón para correr.

Justo cuando pronunció esas palabras, el agua del suelo comenzó a temblar, y caía polvo y gravilla de las paredes y el techo. Se escuchaban gruñidos y pasos sobre el agua pisando fuerte. Maya gritó “¡Huid, estúpidos, o moriréis aquí!”, cogiendo a Tomy del brazo, a quién por poco se le cae el Rattata. Los demás salieron corriendo también tras ellos, sin mirar atrás.

- ¡MAYAAAA! –gritaba Tomy mientras corría con el Rattata a cuestas- ¿¡Que has hecho ahora!?
- ¡Nada de nada! –contestó- ¡Esos Pokemon se han vuelto locos de repente!
- ¿¡Y que hacías en las alcantarillas, no estabas con tu Pidgey!?
- ¿¡Y tu no dijiste que te ibas a dormir a casa de un amigo!?
- ¡Joder, -interrumpió Vicet- no discutáis más y concentraos en huir de lo que sea que venga!

Siguieron huyendo por las alcantarillas hasta que vieron la luz clara de la salida, el mismo desagüe por el que entró el Equipo Atronador, las chicas de amarillo salieron corriendo y gritando, Maya, Samu y sus amigos, estaban un poco más atrás. Solo quedaba un poco para salir, pero entonces, el suelo bajo sus pies comenzó a levantarse y resquebrajarse.

- ¡AAHH! –gritó Roberto- ¡¿Qué pasa ahora!?
- ¡Da lo mismo, -dijo Maya- seguid corriendo!

A duras penas consiguieron salir, con el alcantarillado viniéndose abajo detrás, saltaron hacia abajo, y cayeron en el pequeño canal de agua. Cuando el humo se disipó, el desagüe había desaparecido, y en su lugar solo había piedras y escombros cerrando la entrada, y una especie de tentáculos rojos y cianes que sostenían las rocas, que se endurecieron y volvieron roca en unos segundos. Todos tenían los ojos como platos. El sol salió por el horizonte, amanecía un nuevo día.

- Bueno...-dijo rompiendo el hielo Samu- creo que vos nos debe una explicación sobre lo que sucedió, hermosa.

El teléfono móvil de Tori comenzó a sonar, con unos pitidos muy agudos. Tori estaba dormido delante de la puerta de la habitación de Rem, y se despertó desorientado. Cogió el móvil y contestó.
- ¿Hum?
- ¿Hum? ¿Cómo que “Hum”? ¿Esa es la forma de contestar a tu madre?

Perseguidos por Pokemon, la hermana de Tomy trae más preguntas. Pero Tori también tiene mucho que contarnos y que experimentar...¿acaso os habéis olvidado de la piedra Alba?

Más historia, en el Cap 7.

Primero aclaro una cosa que me han comentado algunos por MP...¡Maya no ES una de las protagonistas de la serie original! Esta Maya es otra, una creada por mí, lo único que tiene en común con la de la serie es el nombre. Perdonad las confusiones.

Y, ahora, os doy un consejo sobre el capítulo y lo que seguirá, y es que lo mireis con calma, y puede que sea más corto que otros, es verdad, pero es aquí, donde todo comienza a encajar.


Cap 7. Un golpe y un agujero, lo obvio es inesperado

"Pronto, muy pronto...queda poco, no será fácil, solo queda esperar, pronto...ocurrirá."

La madre de Tori había llamado porque estaba preocupada, es normal, su hijo se había ido de noche, y no volvió. Tori simplemente se limitó a decir si a todo lo que decía su madre, y tras al menos 10 minutos, colgó. Tori pensó que al menos eso le había hecho despertarse, miró hacia atrás, y bajo para salir. La cola de personas que esperaba para que sus Pokemon fuesen atendidos era incluso mayor que ayer, y tuvo que esforzarse bastante para conseguir salir. Entre apretujones y “perdone, dejen paso”, consiguió salir de espaldas, y justo cuando se dio la vuelta, se golpeó de cabeza contra alguien, y se cayó al suelo.
- ¡Miga pog donde vas, cgiajo! –dijo con acento francés- ¡Nos vas a manchag a mi y a mi Meowth!
- Pero si soy yo el que se ha caído, -respondía Tori mientras se levantaba y limpiaba la espalda- además, ¿cómo..? Un momento, ¿usted no es el dependiente de aquella tienda tan carera del centro comercial?
- ¿Yo cagego? –se enfadó el dependiente con su Meowth entre los brazos- ¡Oh mon Dieux! Mis pgecios en agtículos de lujo son los más bagatos de toda Ciudad Lagousse, ¿cómo te atgeces?...¡ah, voilá, pego si es el petit enfant aquel que me hizo pegdeg un tiempo tan pgecioso pgeguntándome pog la Piedga Alba, algo que no podía compgag! ¿Dónde está tu amigo? ¿Te ha abandonado? ¿Además de pobgetón, eges togpe? Ega de espegag en gente de tu calaña.
- ¡Eh, oiga, encima no insulte! Yo solo quería salir y me he tropezado, ni siquiera le he hecho daño, el que se debería disculpar es usted.
- Sa creible...¿cómo puede seg un niño tan maleducado con un adulto? Ahoga te las vegás con mi pgecioso Meowth, es una lástima destgozag su cagísima manicuga, ¡pego todo sea pog dagte una lecsión!
- ¿Eso es una propuesta de combate? Muy bien, -se preparó mientras tomaba una Pokeball- aunque es muy temprano y no he desayunado... ¡esto es por ser tan carero!

El sol del amanecer golpeaba con fuerza, dejando ver todo con claridad. Algunas de las chicas que acompañaban a Maya le comentaron que tenían que irse, mientras Maya explicaba al Equipo Atronador lo ocurrido. Comenzó diciéndoles que, tras los cortes continuos de luz y suministros provocados por esa “plaga”, ella y sus compañeras planearon entrar hasta el fondo del asunto y descubrir cuál era la causa de esos Rattata tan furiosos y extraños.
- ¿Y no sería más bien –interrumpió con sarcasmo Tomy- que te enfadaste porque hicieron daño a tu pobre, pooooobre Pidgey, y querías vengarte?
- ¿Te doy una patada ahora o la dejamos para cuando acabe de contar la historia?
- Vale, hermanita, no te enfades.
- Ejem, como iba diciendo –continuó Maya- queríamos llegar al fondo de este asunto, nunca mejor dicho, ya que siguiendo pistas descubrimos que el foco de donde los Rattata se movían y donde los ataques se extendían como un árbol echando raíces, era en la depuradora que hay bajo el Parque Central. Intentamos entrar directamente desde las instalaciones, pero lo pensamos mejor y entramos desde un sumidero junto al lago.
- Es justo hacia donde nos dirigíamos para salir –dijo Roberto.
- ¿Sí? Pues tenéis suerte de que nosotras llegásemos antes y os advirtieramos. Esa zona está irreconocible, el sistema de depuración del agua, todas las tuberías, y decenas de cables que llegaban de todas partes entraban en un enorme agujero excavado donde se supone que, según los planos, se ubicaba la máquina principal que limpiaba las aguas. De algún modo parece que la máquina sigue funcionando en algún lugar, el agua sigue siendo limpia y clara...¿pero para que demonios querría alguien excavar tanto? Justo cuando intentábamos bajar y mirar que había al fondo, decenas de Rattata nos atacaron. Intentamos defendernos, pero...al final tuvimos que huir, el resto es historia.
- Joder, ¿un agujero gigante? Esto parece ciencia ficción –mencionó Vicet.
- Todo un misterio...-admitió Samu- pero no más que la duda que me corroe...¡hermosura –gritó dirigiéndose a Maya-, vos vestís así todos los días, o es que el destino ha deseado que pueda ver tu belleza y tus curvas en este día a la luz del amanecer, pues ese pelo alborotado y ese traje me están..
- Oh, joder no –refunfuñó Vicet-, Samu, otra vez no...
- Ya se ha puesto poético otra vez...-dijo Tomy-
- Roberto, ayúdame a pararle antes de que empiece a decir cosas más fuertes. Si no fuese nuestro líder, joder, le daría una patada.
Entre Roberto y Vicet tomaron a Samu, le taparon la boca y se lo llevaron a rastras, mientras Tomy no hacía más que pedirle perdón a su hermana por el comportamiento de Samu. Se dirigieron a un Centro Pokemon cercano, para que atendiesen al Rattata que Tomy recogió en las alcantarillas. Por suerte, era un Centro Pokemon viejo, al que pocos iban. Es más, el cartel de Centro Pokemon estaba a punto de caerse, y el edificio era de madera vieja, y por un momento pensaron en no entrar. Entraron y un anciano estaba roncando sobre el mostrador.
- Esto...oiga, señor, despierte -dijo Tomy, pero el anciano ni se movió- Está dormido como un Snorlax.
- Vale, se acabó el juego, -Roberto tomó aire- ¡VEJESTORIO, CARCAMAL, DESPIERTE DE UNA MALDITA VEEEEZ!

El anciano dejó de roncar. Giró la cabeza, y la puso en otra dirección, y siguió roncando con mucha más fuerza esta vez. Roberto gritó aún más, pero el viejo se limitaba a temblar un poco, para luego seguir roncando. Parecía que ni una tormenta podría despertarle. Samu propuso que se fueran de ahí, ya que de esta forma jamás conseguirían ayudar al Rattata malherido. Tras decir esas palabras, el anciano dió un salto del mostrador, y le quitó el Rattata a Tomy y se puso a examinarlo sobre el mostrador. Con una velocidad endiablada, casi ni se le veían las manos de lo rápido que las movía, tomó visturí, aguja, cordel, botellas y botellines, y más objetos médicos, y los puso en orden sobre el mostrador, y comenzó a usarlos. Al Equipo Atronador no le dió ni tiempo a preguntar que hacía ese hombre, cuando el anciano con un visturí y una aguja en cada mano, los levantó y gritó.

- ¡Operación nº 3281 concluida exitosamente! ¡Más bien, diría que incluso más que existosa! ¿O es la 3282? ¡Bueno que más da, uohjojojojojo!

Un viejo extraño, y parece que algo escéntrico entra en escena, ¡y Tori se enfrenta al dependiente de la tienda lujosa! ¿Que habrá bajo tierra, tan al fondo? ¿Estará la depuradora ahí? ¿Pero, que diablos hace ahí entonces?

Más, en el Cap 8. Yuuso, ¡el doctor centenario y el combate por el honor!

baya que es corto pero los espero con ansias‼!‼!‼